divendres, 12 de gener del 2018

Oriol Junqueras


LLarena quiere cambiar el resultado de las elecciones del 21-D. Su Auto, es a pesar de la morralla constitucional y legal, que jalonan su escrito, es ante todo político. Llarena considera a Junqueras un terrorista extremadamente peligroso para la convivencia social. Piensa que dejarlo asistir al Parlament, provocaría un vendal revolucionario en Cataluña, por eso deniega su excarcelación.

Llanera no lo ve claro. ¡Todos los del bloque constitucionalista o unionista, tampoco! ¡Qué raro! Llanera quiere echar una mano a ese bloque del art.155 en Cataluña tan necesitados. Un sólo hombre contra dos millones de ciudadanos.  

Oriol Junqueras, se ha convertido en “terrorista pacífico” (Augusto Gil Matamala). Llanera lo ha convertido en tal, y en esa lógica, naturalmente, no lo piensa dejarlo salir de prisión. Cumplirá una condena anticipada, hasta el juicio correspondiente. ¿Es eso lo que piensa hacer?



Todos recordamos como miembros de ETA acudían al Parlamento de Vitoria. Pero Oriol Junqueras es mucho más peligros que todos los miembros de ETA juntos. Por eso, LLarena, convertido en el paladín de los defensores del Art.155. mantiene a Oriol Junqueras (Vicipresident de la Generalitat de Catalunya) en prisión. 

Se decía, que los jueces y Magistrados hablan por sus Autos, pero el Magistrado Llarena, habla a través de manifiestos políticos. No otra cosa son sus argumentaciones. ¿Dónde ha visto el Magistrado “grave enfrentamiento ciudadano”? Oriol Junqueras, al decir del Magistrado cuenta o” suscitan su apoyo incondicional [ de la ciudadanía]”, razón por la cual, considera un argumento definitivo para mantenerlo en prisión.

¿Cree el Magistrado que la ciudadanía está hipnotizada por el carisma de Oriol Junqueras? ¿No será que la ciudadanía apoya a los representantes que ella ha escogido? Parece que el Magistrado Llanera tiene dudas acerca de la racionalidad de los ciudadanos que votaron a Oriol Junqueras. El Magistrado LLarena tiene un lema: “Quien evita la ocasión, evita el peligro”. En vez de esos 15 folios del Auto, podía haber resumido en una línea que lo tenía que decirnos.

dijous, 11 de gener del 2018

El TS se quiere convertir en el Gran Inquisidor

El Magistrado del TS que lleva la causa independentista, está llevando el asunto de una manera muy inquietante en un Estado de Derecho. Se comporta como un Inquisidor. Quiere confesiones, culpas, retractaciones. Como si estuviésemos en el Moscú de los grandes juicios del 1936-1938.
  
No se atiene a los hechos. Sólo le interesan los objetivos políticos. Se desliza hacia un abismo. Sólo le falta que abjuren de sus ideas. Palo y zanahoria. Serás libre si desenmascaras al independentismo. Separarse de España es delito. Inútil buscarlo en el CP. Sin embargo, en virtud de esta situación anómala que supone el art.155 de la CE, hoy, en España, es delito ser independentista. Cómo no se puede procesar a los dos millones de electores que han decidido dar su voto a opciones independentistas, se trata de descabezar a aquellos que por su posición se han significado más.


Las elecciones del 21-D no valen nada para el Magistrado del TS. Para el gobierno del PP, tampoco. Siguen y piensan seguir aplicando el art.155. La prisión preventiva sin fianza es el nuevo manual de estilo del TS. Lo que se supone que debe ser una medida excepcional, se ha convertido en lo normal. Eso es lo que les espera a esos exiliados forzosos de Bruselas.


Si vuelven, les espera la “mise-en-scène”, donde la guardia civil, ahora los Mossos d’Esquadra se han hecho invisibles, procederá a la detención, y la comitiva punitiva, marchará hacia el TS. Y de ahí, a la cárcel. ¡Son delincuentes! gritan los constitucionalistas. El President Puigdemont, tiene una papeleta muy difícil. Sería sensato que nadie pidiese heroicidades ni gestos grandilocuentes.