Parafraseando el título de la obra de E.Mendoza, Barcelona se ha convertido en el espectáculo circense del momento. Erase una vez un alcalde cursi -J.Hereu- que quiere encabezar la lista del PSC a las próximas elecciones municipales que están a la vuelta de la esquina. Su contrincante es su viejo conocido de CiU X.Trías. Al parecer las encuestas pronostican un descalabro en las expectativas del PSC. La posibilidad del descalabro electoral del PSOE-PSC en toda España es la crónica de un desastre autoanunciado.
No contentos que estas expectativas, el PSC que ha sido barrido en las elecciones al Parlament de la Generalitat, ha querido hacer un cambio de último minuto. La dirección del PSC no les gusta el actual alcalde y ha propuesto a M.Tura para sustituirlo. J.Hereu debe estar contento con lo sucedido, pero con ese todo jesuítico insufrible ha dicho que le parece bien que M.Tura se postule para ser también candidata a la alcaldía. X,Trías debe de saborear este vodevil cómico. J.Heure ha enfatizado que luchará para conseguir la nominación en las primarias que necesariamente se tendrán que realizar. Lucha de titánes de estar por casa. Algunos dicen que es el triunfo de la democracia. Lo dicen aquellos que ha introducido un elemento desestabilizador al sacarse de la manga un nuevo contendiente que no aparecía hasta el desastre de las elecciones al Parlament.
El asunto es serio en la medida que la desorientación del PSC es digna de investigación. La esquizofrenia ideológica que anida en su seno hace difícil la convivencia en tiempos de dificultades. Seguramente en las etapas donde las esperanzas de triunfos electorales eran reales estas dificultades quedaban arrinconadas en el baúl de los recuerdos. Pero ahora con las crisis sistémica que padecemos y las medidas poco sociales de las que hace gala el gobierno socialista de Zapatero, las esperanzas de triunfos electorales se evapora rápidamente. Corbacho el hombre del PSC-PSOE ha hecho un papelón desgraciado. No todo es culpa de él, pero en política se paga cuando las cosas no van bien, y no han ido nada bien. Hay un desparecido en todo este affaire. ¿Dónde esta José Montilla? Al parecer tuvo una reunión con J.Heure para decirle que debería apartarse de los próximos comicios, pues, las encuestas indicaban la amenaza de desastre. J.Heure debió decirle que no era él precisamente el más indicado, pues, había perdido la Generalitat por goleada. Los medios de comunicación nos dicen que fue en un restaurante donde intercambiaron opiniones y discreparon. No sé si les debió sentar bien la comida o alguno se le atraganto.J.Heure debió tomarse un chupito de "aromas de Montserrat" para tranquilizarse. J.Montilla como tiene la sangre de horchata no debió necesitar ningún chupito.
Ahora, los militantes y simpatizantes deberán votar en unas primarias para conseguir un candidato. X.Trías debe estar desde hace tiempo redactando su discurso como alcalde de Barcelona. Mientras en el PSC, J.Heure y M.Tura pugnan por desintegrar al PSC. Como no todo puede ser tragicómico, dejo el vídeo de Peret para recrearnos en la ciudad de los prodigios que es Barcelona.