dijous, 8 de desembre del 2011

La regla del juego

Leo en “La regla del juego. Sobre la dificultad de aprender filosofía” de José Luis Pardo (ed. Galaxia Gutenberg/Círculo de Lectores) lo siguiente:

“¿Qué significan, entonces, interpretadas en sentido figurado, todas estas imágenes terribles de hipnotizadores, sátrapas, déspotas, tiranos, verdugos, reyes absolutos y reos desnudos, imágenes con las cuales miles de adolescentes de la izquierda universitaria postindustrial entretienen su larguísima scholé?” (pág.404)



La respuesta es que hay dos modos de impedir que los hombres y mujeres puedan emanciparse, que puedan convertirse en adultos: a) la primera es mantenerlos atados a sus “comunidades narrativas” e impedir su educación, en imposibilitar el acceso al espacio público que es la escuela. No por casualidad la primera medida de los talibanes cuando tomaron el poder fue la prohibición de la escuela más allá de la repetición del Corán, sólo para los niños y jóvenes, mientras que las mujeres y niñas se las hacía desaparecer del espacio público. Lo que se quería era simplemente adocenarlos en la repetición de los propios prejuicios; b) la segunda vía, más retorcida es alargar la etapa de la escuela y hacerla indefinida. Si la escuela supone la virtualidad de la emancipación, la operación de hacerla eterna desbarata su virtualidad. La escuela debe tener su salida natural al ámbito social y laboral, es decir, el espacio público. “Salir a la calle” expresa la desembocadura de esa etapa que es la escuela.



En nuestras sociedades modernas, la emancipación, es decir, distinguir la verdadero de lo falso, la distinción entre real e imaginario, se pretende borrar. La escuela adquiere caracteres que en vez de potenciar esa emancipación, hacerlos críticos, los convierte en “menores de edad”. La minoría de edad de la que hablaba Kant, adquiere perfiles borrosos pero reales en nuestras sociedades postindustriales. Estudios que se alargan sin justificación. Obligatoriedad de la enseñanza para evitar “salir a la calle” y encontrarse en el paro. La calle se ha convertido en un desierto. Por esos nuestros jóvenes se encuentran tan a gusto frente a la pantalla del ordenador. En ese espacio virtual, adquieren roles que no pueden ejercer en el mundo real. Se convierten en héroes o villanos y pueden ejercer impunemente cualquier cosa que se les ocurra. Todas ellas se caracterizan por la falta absoluta de reglas. El espacio público está constituido por normas legales, por límites que suponen la posibilidad de la convivencia. El diálogo es consustancial al espacio público, pero nuestros jóvenes se ejercitan en un mundo de “excepción”. El mundo virtual es un “estado de excepción” se que ha convertido en norma y nuestros jóvenes adquieren destrezas que en el espacio público son inservibles.

diumenge, 4 de desembre del 2011

Economistas a la greña


Leo el artículo de Paul Krugman y no dejo de pensar que el gremio de economistas debería hacer urgentemente examen de conciencia. ¿Cómo es posible la diversidad de opiniones sobre lo que debería hacerse? ¿Qué clase de ciencia es la economía? Sabemos que es un ciencia sombría y habría que decir que también es confusa. Nuestras eminencias de la UE afirman la necesidad de reducción del gasto, control presupuestario, reducción de salarios, es decir, hacen una llamada a la recesión. Los neokeynesianos nos dicen que en épocas de recesión lo que conviene es una economía de expansión. Los Estados deben liderar el crecimiento con un aumento de la demanda que impulsará la reactivación económica. ¡Habrá inflación! ¡Habrá aumento del déficit! La respuesta es que una vez se ponga en marcha la demanda agregada, el aumento de dicha demanda supondrá un estímulo para la contratación de mano de obra lo que supone un aumento del empleo y una reactivación del consumo de las familias y empresas con el consiguiente aumento de recaudación impositiva –IRPF e IVA- y la reducción de la participación del Estado y una reducción del déficit.

Draghi vs Krugman


Pero, resulta que nuestras autoridades monetarias no están por la labor, Keynes está enterrado y quisieran  olvidarlo. Ahora, el nuevo mantra es la reducción del gasto público. Una reducción que sólo beneficia a los de siempre. Si desde el 2008 hasta ahora la zona euro ha gastado 1,608 billones de euros para lubricar a los bancos el resultado es que siguen secos. No hay crédito a las empresas ni las familias. Así qué ¿dónde esta el dinero?. Si esas cifras astronómicas se hubiesen utilizado para reactivar la economía real, no estaríamos en esta situación. La zona euro se ha convertido en zona catastrófica.

Alemania es el principal responsable de una irresponsable actuación. Por salvaguardar sus propios intereses –legítimos- está obligando a los demás al suicidio económico. Vivimos en una economía global. Si los países del sur de Europa se hallan en el abismo, gracias también a la irresponsable actuación del BCE, por poner en el mercado la propia solvencia de los Estado, la crisis del sur de Europa y su deuda soberana afecta al consumo de bienes alemanes. Y, por extensión la crisis acabará afectando también en Alemania. Estamos ante el dilema de los prisioneros. Somos una cuerda de presos. Si Alemania y Francia encabezan esa cuerda, los restantes prisioneros –PIG- de la cola, también están atados, si lo que quieren es soltarse y dejar al resto de los PIG entonces no tendrá sentido seguir hablando de Europa. Se habrá desintegrado la UE para décadas. Al parecer los mercados ven atractivo es escenario. Pues, sus ataques al euro, vía PIG nos nuestra claramente sus intenciones.

dissabte, 3 de desembre del 2011

Estados catalépticos


Mirando la prensa, se comprueba que la política europea es inexistente. Europa y su proyecto han sido barridos por una crisis que se inicio en el 2008 y está arrasando las estructuras del estado del bienestar. Nuestro dirigentes se han convertido en auténticos gestores del capital. La economía se ha convertido en una realidad surrealista que está socavando la economía real. Lo real sucumbe a lo virtual. La especulación se hace carne en los diferenciales de la deuda pública que los Estados se ven obligados (sic) a pagar a los mercados para poder financiarse y poder seguir drenando liquidez a los bancos. ¡Círculo virtuoso!


La inmediatez de la economía hace imposible que nuestros mandatarios se encuentran con el dilema de seguir el juego que los mercados han impuesto, y que los gobiernos tuvieron la oportunidad de regularlos con la crisis y derrumbamiento del sistema financiero (2008), pero que no quisieron realizar presionados por los lobbies bancarios y ahora nos encontramos que nos anuncian medidas draconianas “para salir de la crisis”. La lógica del mercado dice que si puedes conseguir rentabilidades superiores no las dejes pasar. Eso deben pensar las entidades gestoras que mueven los mercados. Los gobiernos pagan a precio de bonos basura el bienestar de la sociedad actual y la venidera. ¡Nunca se había llegado a este dislate mayúsculo!



La sociedades democráticas están siendo laminadas a través del miedo. La precariedad y la exclusión social son ya una realidad. Las seguridades que acompañaban al Estado de bienestar son puestas en entredicho por los propios gobiernos que deberían garantizarlas. La causa de este desaguisado es simplemente la codicia. Se puede leer en la prensa que “en total fueron 1,608 billones de euros” las ayudas que los gobiernos de la UE han aportado al sistema financiero. ¡Y ahora quieren exprimir aún más las arcas del Estado –todos nosotros- mediante la presión que ejercen para aumentar la rentabilidad de la deuda pública! No sé qué pensar. Cualquier opción parece un contrasentido. Parece claro que las élites económicas quieren el derrumbamiento del Estado. Quieren un estado mínimo que sólo actúe para salvarlos a ellos, al precio de hundirnos a todos. Lo peor es que lo están consiguiéndolo en nombre de la crisis.

dilluns, 28 de novembre del 2011

La bolsa ciclotimica


Las noticias que proporcionan los mercados son contradictorias. La bolsa ha subido un 4,59% la causa no hay que buscarla en una genial maniobra del actual gobierno en funciones o las declaraciones de M.Rajoy sobre lo que piensa hacer. No, la causa es “la expectativa de que los países del euro muevan ficha a partir de mañana”. Al parecer los mercados se contentan con cualquier cosa. Mañana los ministros de Economía de la UE se reúnen para acordar el “refuerzo del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera y su ampliación desde los 440.000 millones actuales, cifra que se reduce a unos 250.000 millones teniendo en cuenta su capacidad real de fuego”. Si no lo entiendo bien- y es fácil que sea así- los ministros reducen las expectativas de dichos fondos a la mitad. ¡No sé por qué están tan eufóricos! Si las previsiones eran aumentar este Fondo y ahora piensan reducirlo, es que, primero, hicieron un vaticinio erróneo y ahora rectifican. Y, sin embargo, las bolsas europeas acogen con esperanza dicha reunión. No se hace difícil entender semejante optimismo.


 
En paralelo, la OCDE nos advierte del tenebroso futuro que nos aguarda en España. Las previsiones son para echarse a temblar. No se reduce el empleo, no aumenta el PIB, habrá estancamiento. Si estas son las previsiones, a pesar de los ajustes que se han llevado a cabo, la pregunta es ¿para qué se están haciendo estos recortes sociales, que destruyen la solidaridad entre los ciudadanos? Ya sé que la respuesta de los “expertos” es que gracias a los recortes las previsiones serían aún más catastróficas. Dudo de esta afirmación.


Mañana será otro día. Y veremos cómo las bolsas reaccionan. Nada está escrito en futuro. Pero queda cada vez más claro que nos aguardan tiempos difíciles, especialmente a los más desfavorecidos. Estamos creando condiciones que a medio plazo pueden tener consecuencias difíciles de calibrar. Ahora soy yo quien está divagando...

diumenge, 27 de novembre del 2011

Desconcierto....


Las primeras páginas de internacional son un ejemplo de desconcierto. Islamistas “moderados” vencen en elecciones democráticas (Marruecos). Egipto quiere pasar página del régimen anterior, pero los militares no quieren. La represión ha demostrado lo frágil que es el tránsito hacia otro régimen. Quien no cambia de paso es Siria y sus maneras. Al igual que el Yemen donde se pretende un cambio donde la sombra de Saleh se hace cada vez más alargada, a pesar del adelanto parta febrero de elecciones. Paquistán ha exigido a EEUU el cierre de una base aérea como consecuencia del cual murieron 28 soldados paquistaníes a causa de “fuego amigo” provocado por un helicóptero de la OTAN.



En el plano económico simplemente hay continuidad en la amenaza contra el euro. Los países PIG siguen pagando cada vez más por su deuda. El Estado se ha convertido en mercancía que se compra y se vende en los mercados. Los fondos de inversión y la banca hacen su particular agosto comprando bonos a intereses desorbitados. Mientras la EU sigue exigiendo a los PIG que se aprieten los cinturones. Más precariedad es el horizonte que nos espera. Los ciudadanos vivimos nuestra particular esquizofrenia. Las clases más débiles no pueden ahorrar, mientras que las clases medias se comen todos los impuestos y las clases altas simplemente no pagan impuestos, pues, tienen mecanismos para derivarlos a través de empresas que tienen una fiscalidad baja.

 

Mientras los políticos se buscan acomodo en el entramado institucional. Montilla es un ejemplo. Ahora, trasladara sus ocupaciones al Senado. Una institucional del cual se habla sobre su inutilidad al no ejercer verdaderamente sus funciones. Allí reposará como tantos otros. Al igual que esos ejecutivos de la banca que se repartirán veinte millones de euros en planes de pensiones. Aunque se halla “descubierto” no por eso dejarán de cobrarlos. Si existe un contrato en firme habrá que ejecutarlo. Estos pequeños detalles no ayudan en nada a la confianza de nuestras instituciones que exigen sacrificios para todos, pero del que quedan exentos los de siempre.




diumenge, 20 de novembre del 2011

Credibilidad del sistema

Las agencias de noticias nos dicen que a las 18h había un 3% menos de votantes que en los últimos comicios del 2008, un 57,65%. Es seguro que los militantes de la derecha como los partidos herederos de HB habrán ido a votar como exige el guión. En Cataluña, EQUO no tenía representación. Es curioso que en buena parte de Comunidades Autónomas haya representación. Catalonia is diferent.

Mañana será otro día. Algunos perderán el trabajo de político profesional. Es seguro que buena parte de todos ellos se colocarán de forma decente. Algunos se reincorporarán a sus antiguos puestos de trabajo y otros buscarán acomodo en otros ámbitos. En cambio, otros adquirirán la condición de Diputados y Senadores. Los mercados tal vez dejen un guiño a la derecha si gana de forma abrumadora. Si su victoria fuera pírrica mañana mismo habría “tensiones”. La incertidumbre es total es todo caso. Claro que ésta es sobre todo porque los mercados quieren mayores intereses. Los Estados se han colocado de manera insensato en el disparadero de los mercados. La deuda del Estado ha entrado a formar parte de otra mercancía más.



Los intereses de la deuda que se eleva de manera artificial, supone hundir más aún a las economías que luchan por su credibilidad, cuando fue el sistema financiero que, a causa de las desregulaciones, acabaron en la espiral que nos ha llevado a las economías occidentales a esta situación. Ahora el sistema financiero quiere cobrarse “sus” intereses. Y lo peor es que los gobiernos de la UE se han puesto manos a la obra para conseguirlo. Mientras se siga en esta senda autodestructiva poca cosa parece que podamos hacer los ciudadanos. Los intereses que hay que pagar por la deuda son los servicios que disminuyen del Estado del bienestar.

Sólo unos políticos pusilánimes –la UE- nos están llevando a la bancarrota del Estado. Es como si el tiempo de Margaret Thatcher se hubiese detenido para devorarnos a todos y su “no hay alternativa” se hubiese convertido en el axioma de los mercados y por ende de la política.

dissabte, 19 de novembre del 2011

Desconcierto en Occidente


Observando lo que sucede en los países de las revueltas de primavera y la sangría de Libia y Siria, el porvenir no parece muy radiante. Incertidumbre es una palabra que ha pasado de ser un adjetivo para convertirse en una entidad ontológica. Es decir, se ha convertido en un modo de ser (existencial).

Que la plaza Tahir en el Cairo se llene de manifestantes es un buen síntoma democrático, pero que entre los manifestantes estén los Hermanos Musulmanes y afines resulta muy inquietante. Lawrence Wright, en "La torre elevada. Al-Qaeda y los orígenes del 11-S, ganadora del Premio Pulitzer,  nos analiza de manera magistral el proceso que condujo a la catastrófe y en ese proceso aparecen los Hermanos Musulmanes. Quieren un estado teocrático. Repito que en la plaza Tahir estén todas las fuerzas sociales y política debiera ser motivo de satisfacción, sin embargo, da miedo pensar que esas voces que se manifiestan contra los militares que ralentizan los procesos de transición hacia elecciones democráticas, pudieran acabar con la victoria islamista y la posterior deriva teocrática. ¿Qué percepción pueden tener esas sociedades que abrazan sistema que acaban con las libertades en nombre de dios?


Siria sigue su particular destrucción de la sociedad para mayor gloria de El Asad. Rusia avala la política sanguinaria y está dispuesta al veto en las ONU para evitar males mayores. Así que Occidente no tiene, al parecer mucho que ofrecer. Más allá de buenas palabras no hay compromisos. Libia ha sido un caso excepcional. La resistencia final del régimen ha sido numantina y trágica. Al parecer Saif al Islam, segundo hijo de Gadafi y futuro sucesor en el régimen ha sido detenido al sur del país. Libia se mezclaba un país dividido y muy poco poblado, y unas riquezas minerales importantísimas. Con la excusa humanitaria de defender a la población civil, Occidente se permitió  hacer de buen samaritano.

¿Qué pensarán en Palestina o Siria? ¿Acaso no son masacrados por su gobierno -Siria-, y cuando toca por las fuerzas de ocupación -Israel-en Palestina? ¿Por qué se hacen diferentes varas de medir?


Por cierto, mañana hay elecciones, si eres uno de los indignados -¿y quién no lo es?- puedes quedarte en casa y cultivar un virtuosismo virtual o bien bajas a la arena política, donde no hay gestos definitivos, ni transformaciones milagrosas ni recetas que lo curen todo, pero esos votos suponen una apuesta para que el ciudadano y el consumidor que somos, podamos fundirnos y exijamos otras políticas. ¡Amén!