[Los manteros desafían el dispositivo policial de Colau]
Manteros y policías jugando un juego inútil, porqué los manteros se limitan a ofrecer productos de ínfima calidad a precio de saldo y hay mucha gente que los compra. Los manteros no son el problema. Es mucho más alarmante los grupos organizados que se dedican a robar en el metro y que salen impunes en la inmensa mayoría de los casos, porque su infracción constituye no un delito sino una falta, debido a la cuantía que se sustrae. Los manteros no roban nada, les abastecen de productos que salen del puerto. Los manteros son el eslabón más débil de la cadena. Sólo por eso es más fácil ensañarse con ellos. ¿De dónde salen esos productos, de qué almacenes y distribuidores? Es cierto ocupan todo el espacio que pueden. La Alcaldesa Colau, debería reflexionar sobre su propia actitud ante este problema.
Gracias al Sr. Valls, puede empezar una campaña, destinada al fracaso, contra los manteros. Quiere solucionar el problema transformándolo en uno de seguridad; resulta inquietante pasearse por el Paseo Marítimo lleno de policías que parecen que tratan de detener a presuntos terroristas, cuando lo único que hay, es a manteros esperando la oportunidad de exponer su “género” a la vista de posibles compradores.
Los tópicos de la competencia desleal y demás monsergas, no van a sensibilizar a los posibles compradores. ¡Vivimos en una sociedad capitalista!