Si viviera Umberto Eco, seguro que se haría cargo de este asunto. Desgraciadamente, ya no puede escribir sus interesantes artículos sobre la sociedad de su tiempo. Italia siempre ha sido el laboratorio de Europa. Italia ha ido dos pasos por delante de los demás, lo que no quiere decir que sea bueno; y ello nos permite vislumbrar un futuro imperfecto. Suspender a la docente, porque unos alumnos realizan un trabajo, supone que debe haber sido denunciada a las autoridades educativas, amén de elevar el trabajo de los alumnos a nivel de asunto de Estado, nada menos. Caza de brujas se llama este procedimento. Demuestra el talante autoritario de un gobierno que se caracteriza por el desprecio y prepotencia contra los más débiles. La extrema derecha sólo quiere adhesiones inquebrantables, habrá que estar atento, no sólo en Italia, sino también en cualquier país de Europa, ya me entienden.
