Viatges, Llibres, Reflexions, Imatges, Musica, Filosofia, Literatura, Política, Miscel·lània, Blog de Viatges
dimarts, 13 de novembre del 2012
políticos y movimientos sociales
Los movimientos sociales y los “nuevos mártires”
del sufrimiento social –suicidios, depresiones, etc.,- han hecho reaccionar a
nuestra clase política. Cuantas frases inútiles acerca de imposibilidad
ontológica que los bancos cancelarán la hipoteca mediante la entrega de la
vivienda. PSOE y PP afirmaron que la dación en pago causaría el derrumbe del
sistema bancario.
El suicidio de varias personas cuya causa habría
que buscar en el detonante de la ejecución hipotecaria y la presión social, amén de la intervención
insólita del estamento judicial, han hecho que gobierno y oposición negocien un pacto sobre el tema hipotecario. Lo extraño, como bien ha dicho Rosa
Diez, es que no se haga en el Congreso de los Diputados, es decir, luz y taquígrafos. Se
pide transparencia y un debate en el todos los partidos puedan decir lo que corresponda.
No puede ser que el gobierno meta prisas ahora para salir en la foto del viernes
proclamando un nuevo milagro.
¿En qué quedo el manual de buenas praxis que los
bancos debían regirse en cuestiones hipotecarias? Ya sabemos en qué quedo todo
aquello. Los bancos son entidades privadas que quieren beneficios y cuando
tienen perdidas por sus calamitosas gestiones, exige que el Estado los avale o
pague sus deudas. Siguiendo la misma lógica que aplican ellos a sus “clientes-rehenes”,
los bancos deberían dejarse hundir, que los accionistas perdieran los que han
puesto y el Estado garantizase a los impositores de depósitos y el banco respondiese
con el patrimonio del banco.
En otro orden de cosas, las intervenciones de
los ministros son cada vez más inquietantes. El ministro Guindos nos habla que
en el tema hipotecario sólo se atenderán a las familias de buena fe. ¿Qué clase
de familias son esas? ¿Acaso todos actuamos de mala fe? Economía y moral
resulta una contradicción en los términos. El ministro del interior nos revela
que es católico, apostólico y romano, al afirmar en el Senado que volvería a
firmar contra el matrimonio homosexual. ¿El ministro habla en nombre del
ministerio que dirige o como creyente? Al parecer el gobierno del PP se cree
inspirado por el Espíritu Santo, y naturalmente, gracias a esta intercesión
España va bien. Amén.
diumenge, 11 de novembre del 2012
La muerte de una anciana....
Leo en El País de hoy, una noticia que hiere y nos agrede. La vulneración de derechos de los más débiles se expresa en esa trágica noticia. Decir trágica no quiere decir que era inevitable. La Ley de Dependencia era una respuesta a esas situaciones, pero antes de llevarla a la práctica y con la excusa de la crisis se ha echado por la borda lo que era la medida más importante en temas sociales desde la democracia. Sin embargo, esa madre y esa hija, no eran sistémicas, mientras que lo que les quitamos a la Ley de dependencia se lo damos a los bancos, que ellos si son sistémicos, ¡menuda mierda!
divendres, 9 de novembre del 2012
Bancos letales
“Amaya Egaña, una mujer de 53 años, ha fallecido
esta mañana al arrojarse al vacío desde el balcón de su vivienda en Barakaldo
(Bizkaia) cuando iba a ser desahuciada” (El País, 9/11/2012). La crisis se expresa en la impotencia y la desesperación
de una mujer que se lanza al vacío. No todos se tiran de la ventana. Algunas personas
si lo hacen. Deberíamos meditar sobre este drama al que los gobiernos del PSOE
y el PP han hecho oídos sordos a lo largo de la crisis. Incluso el estamento judicial
ha clamado por reformar las leyes hipotecarias que son un cheque en blanco para
los bancos, que nos han llevado a esta crisis. No ve visto que ningún consejero
delegado de las entidades bancarias se haya suicidado.
¿Por qué no nos dicen cuál es la entidad por la que
se hacia el desahucio? Deberíamos TODOS retirar nuestros “escasos” fondos de
esas entidades que al amparo de la ley están destrozando la vida de tantos
miles de conciudadanos.
dimarts, 6 de novembre del 2012
Drama en Madrid
Los norteamericanos votan, y ¿qué?. ¿ Acaso
mejoraran nuestra maltrecha dignidad? ¿Acaso esperamos que solucionen nuestros
problemas? Podríamos llenarnos la boca...... pero acaso importa.
El drama en Madrid debería hacernos pensar en la
fragilidad de la vida. El cúmulo de fatalidades –negligencias, omisiones,
irresponsabilidad, etc.- dan como resultado que unas jóvenes (4) que van a una
fiesta acaben muertas. Inmediatamente el Ayuntamiento descarga toda la
responsabilidad. TODA. Pero el local era de titularidad pública. Los abogados
se frotan las manos ante tamaño reto jurídico. Y en medio del drama, aparece el
padre de una de ellas para declarar que si Dios la quiere con
ellas así sea su voluntad. No sé si todos los familiares de las demás víctimas
pensaran lo mismo. Cada uno llevará ese desastre como mejor sepa llevarlo.
Su nombres eran: Belén, Katia, Rocío y Cristina. Desde esta página mi solidaridad en un dolor incomunicable.
divendres, 2 de novembre del 2012
hastío o revienta
Las semanas avanzan pero la sensación de
frustración se hace más intolerable. El gobierno hace como si estuviese
manejando la crisis con habilidad y acierto. Incluso el ministro de Hacienda
nos dice que los próximos presupuestos son los más “sociales de la historia de
la democracia”. No sé en qué país vivo. Entre los cantos de sirena de un futuro
estado catalán y la despreocupación del gobierno que espera que todo pase, la realidad no deja margen.
Mientras la tiranía de lo cotidiano ahoga
cualquier discurso triunfalista. Los ciudadanos estamos sufriendo el miedo al
desamparado. La solidaridad se deshace como el azúcar. Los recortes sociales
hacen que cientos de miles de personas se vean en situaciones impensables hace
sólo un año. Las cifras de paro aumentan, la reducción de las prestaciones
sociales –subsidio de paro, ayuda familiar- se reducen de manera ignominiosa,
mientras que los bancos viven en otro plano. Ellos son sistémicos, es decir, son
insustituibles, mientras que los ciudadanos somos prescindibles. Los bancos
deben miles de millones, pero nadie los embargara ni los echaran a la calle,
como se hace con cientos de miles de ciudadanos que son desahuciados por falta
de pago cerca de 170.000 en tres años, debido a la crisis que los propios bancos generaron.
Se han inventado un “banco malo”, la expresión
no deja de ser inquietante. Incluso el “banco malo” podrá tener beneficios a
largo plazo, pero no para los ciudadanos, sino para aquellas empresas que
apuesten para sacar adelante el negocio de las hipotecas. Los bancos no
perderán, porque la idea de perdidas es anatema.
“ Ve a la Bolsa de (...) un lugar donde reina más dignidad que en muchas cortes: encontrarás representantes de todas las naciones reunidos allí para fomentar el bienestar de la humanidad; allí los judíos, los mahometanos y lo cristianos tratan unos con otros como si fueran de la misma religión; los únicos a los que consideran infieles son lo que quiebran, (...).(Voltaire, Cartas filosóficas. Las cursivas son mías)
Los significativo de ese texto es que hoy, ya no
hay que preocuparse por la suerte de los bancos, porque están asegurados con
los impuestos de todos nosotros. Sólo se socializan las perdidas mientras que
las ganancias irán a parar a los bolsillos de los accionistas de esas
entidades. Cuando nos dicen que los bancos son necesarios, simplemente están
haciendo apología de ese capitalismo tramposo que quiere seguridades, mientras
que echa a la miseria a los que han creído las mentiras de los gobiernos.
dimecres, 17 d’octubre del 2012
Bancos de ira
Leo
en Violència de Slavoj Zizek lo siguiente: “Els moviments polítics d’esquerres
són con uns “bancs d’ira”. Acumulen les inversions d’ira col·lectiva de la gent
i els prometen una venjança a gran escala, el restabliment de la justícia global”["Los movimientos políticos de izquierda son como un "banco de ira". Acumulan las inversiones deira colectiva de la gente y les prometen una venganza a gran escal, el restablecimiento de la justicia global" ]
(pàg.190).
Llama la atención que la derecha no se preocupa
por establecer la “justicia global”, en la medida que tal “justicia” no es posible
llevarla a cabo. Las desigualdades e injusticias son para la derecha, naturales,
como lo son las catástrofes naturales, imponderables ante los cuales no se
puede hacer nada. Por eso las derechas no se ven en ninguna obligación de
restituir esa “justicia global”. La historia es simplemente la constatación de
que hay unos que siempre ganan y otros siempre pierden. ¡Hasta cuándo no
aprenderemos esta lección!
Los movimientos sociales del 15M, por ejemplo, acumulan
ira, resentimiento y rencor contra los bancos, y todos su adláteres que desde
la economía y la política afirman que no hay otra solución que salvar al sistema
financiero antes que a las personas. ¿Cómo encauzar esa ira? En democracia, a
través de las manifestaciones y posteriormente, a través de las urnas. ¿Qué
sucede cuando los partidos políticos están soldados a las finanzas? ¿Qué sucede
cuando por decir en clave de lo Hirschman, voz sin salida? ¿No hay la tentación de ir más
allá de la voz –violencia-? También es posible que la opción de la apatía democrática, la abstención y el desapego sean
otra salida que la clase política ve como un mal menor, y que la derecha
bendice al decirnos que las mayorías silenciosas son lo mejor de cada casa.
Subscriure's a:
Missatges (Atom)