diumenge, 22 de març del 2020

La buena voluntad no será suficiente







La fragilidad del ser humano es consustancial a nuestra naturaleza. Sin embargo, no siempre somos conscientes de está, excepto, en situaciones de emergencia. Ahora nos damos cuenta de la vulnerabilidad. La vida se nos puede escapar en un suspiro. La fría estadística nos dice que llevábamos 1720 muertes por causa del COVID-19. Para los virus, no hay nada personal contra nosotros, es una cuestión de supervivencia. EL lenguaje determina demasiadas veces nuestro esquema mental. Usamos y abusamos de las metáforas, por ejemplo cuando se habla de guerra contra el virus. 

Deberíamos distanciarnos de esta manera de entender lo que está sucediendo. Dice Daniel Innerarity, que "esto no es el fin del mundo, sino el fin de un mundo" (Ara.cat, 22 de març). Es el mundo de la sensación de omnipotencia en la que nos instalamos demasiadas veces, sin ser conscientes de las amenazas -otra metáfora- que nos rodean. Ahora no se trata de invocar a los dioses, sino a los científicos. Abandonamos la investigación científica, cuando no nos urge encontrar un remedio. Ahora hay urgencia para buscar una vacuna salvadora. Necesitamos conocimiento y no retórica. Contemplar en las ruedas de prensa a militares no es más que un ejercicio de retórica gratuita. Necesitamos que nuestros investigadores, puedan ejercer sus funciones con los medios que demasiado a menudo se les priva de manera mezquina. Es hora de poner el conocimiento en un primer plano. La salud de la población está en juego. 







21/03/2020



Recomendaciones musicales






                Vitaminas musicales





dissabte, 21 de març del 2020

El COVID-19 rompe todos nuestros esquemas





fallecidos 1326


fallecidos 1002

20/03/2020


Los datos que nos llegan, especialmente de Italia, son descorazonadores y nos previene de lo que nos puede suceder a nosotros. En Italia la cifra de muertos 4825 nos lleva pensar que esta cifra mortal, también puede convertirse en realidad en España. Seguimos a remolque de lo que ha sucedido en Italia. La próxima semana puede ser un continuo goteo de muertes a causa del COVID-19. No insistiré en lo que muchas voces autorizadas nos han dicho, confinamiento, pero el gobierno central, prefiere que sean otros quien conviertan esa necesidad en realidad. Las empresas, mirando por su propia supervivencia, se resisten a cerrar, esperan que sea el gobierno quien lo haga, pero no lo hace.

Todos estamos atrapados, esperando no ser alcanzados por el virus. No sé qué va a suceder en los próximos días, pero resulta abrumador el número de muertes que esta semana nos interpelarán acerca de lo que estamos haciendo mal. Los hospitales están al borde y puede llegar un momento que habrá que empezar a escoger entre enfermos. No hay suficientes medios, es así de simple. No estamos preparados para lo que se acerca. No digo que no haya buena voluntad, pero no basta, porque lo que ha habido ha sido inacción en los momentos iniciales y está faltando contundencias en las medidas. 

divendres, 20 de març del 2020

El COVID-19 se lleva por delante a 1002 personas...de momento







[Según ha comunicado el Ministerio de Sanidad, han contabilizado un total de 1.002 defunciones, mientras que los contagios se elevan a 19.988, suponiendo un incremento de 16,5% respecto ayer jueves. (Ara.cat)]

Estos datos suponen que en menos de dos semanas, ha habido más muertos que en el actuación de ETA a lo largo de cuarenta años. Lo que quiero resaltar es la peligrosidad de esta pandemia que aún, todo el mundo, se toma demasiado a la ligera. La cifra es muy grande, y todo parece que irá a más en las próximas semanas. El gobierno central tiene el deber de salvaguardar la salud de la población, y sabe que nada más hay una solución, todo el mundo en casa. Puede haber excepciones, pero como norma general, se deben cerrar fábricas y todo el sistema productivo que no tenga incidencia inmediata para con la salud, y la alimentación, la energía. transporte, etc.



El Presidente de la Generalitat, tiene razón cuando denuncia en el desierto, que hay que confinar a la población en casa, pero el gobierno central hace oídos sordos a sus declaraciones reiteradas hasta la extenuación. Si ya tenemos 1.002 personas muertas, ¿ qué espera el gobierno central para tomar medidas extremas? ¿Quizá cuando haya 2000? Estamos ante una amenaza sin precedente para la salud de la población y el sistema sanitario que protege esta salud. ¿Debemos dejarlo caer por el bien de la economía?





19-03/2020

El COVID-19 se lleva por delante a 1000 personas...de momento

"Segons ha comunicat el ministeri de Sanitat, han comptabilitzat un total de 1.002 defuncions, mentre que els contagis s'eleven als 19.988, suposant un increment de 16,5% respecte ahir dijous". (Ara.cat)

[Según ha comunicado el Ministerio de Sanidad, han contabilizado un total de 1.002 defunciones, mientras que los contagios se elevan a 19.988, suponiendo un incremento de 16,5% respecto ayer jueves. (Ara.cat)]

Aquestes dades suposen que en menys de dues setmanes, hi ha hagut més morts que en el actuació d’ETA. El que vull ressaltar es la perillositat d’aquesta pandèmia que encara tothom s’ho pren massa a la lleugera. La xifra és molt gran, i tot sembla que anirà a més en les properes setmanes. El govern central té el deuré de salvaguardar la salut de la població, i sap que rés més hi ha una solució, tothom a casa. Pot haver excepcions, però com a norma general, s’han de tancar fabriques i tot el sistema productiu que no tingui incidència immediata envers la salut, i la alimentació, la energia. 

[Estos datos suponen que en menos de dos semanas, ha habido más muertos que en el actuación de ETA a lo largo de cuarenta años. Lo que quiero resaltar es la peligrosidad de esta pandemia que aún, todo el mundo, se toma demasiado a la ligera. La cifra es muy grande, y todo parece que irá a más en las próximas semanas. El gobierno central tiene el deber de salvaguardar la salud de la población, y sabe que nada más hay una solución, todo el mundo en casa. Puede haber excepciones, pero como norma general, se deben cerrar fábricas y todo el sistema productivo que no tenga incidencia inmediata para con la salud, y la alimentación, la energía. transporte, etc.]



El President de la Generalitat, té raó quan denuncia en el desert, que cal confinar a la població a casa, però el govern central fa oïdes sordes a les seves declaracions reiterades fins l’extenuació. Si ja tenim 1000 persones mortes, a què espera el govern central per prendre mesures extremes? Potser quan hi hagi 2000? Estem davant d’una amenaça sense precedent per la salut de la població i el sistema sanitari que protegeix aquesta salut. Hem de deixar-ho caure per el bé de l’economia?

[El Presidente de la Generalitat, tiene razón cuando denuncia en el desierto, que hay que confinar a la población en casa, pero el gobierno central hace oídos sordos a sus declaraciones reiteradas hasta la extenuación. Si ya tenemos 1.000 personas muertas, ¿ qué espera el gobierno central para tomar medidas extremas? Quizá cuando haya 2000? Estamos ante una amenaza sin precedente para la salud de la población y el sistema sanitario que protege esta salud. ¿Debemos dejarlo caer por el bien de la economía?]