Es mostren els missatges amb l'etiqueta de comentaris UPyD. Mostrar tots els missatges
Es mostren els missatges amb l'etiqueta de comentaris UPyD. Mostrar tots els missatges

dilluns, 4 de novembre del 2013

Estampas otoñales


La fotografía de Rosa Díez alzando los brazos simboliza la conexión mesiánica de UPyD y su líder. Cada uno puede idolatras a quien quiere. El problema es que un partido de aluvión como es UPyD se sostiene por el liderazgo absoluto de una sola persona. La fotografía exalta el culto a la personalidad. No es nada nuevo. Ese gesto desdice mucho de su retórica. Mi experiencia en UPyD fue breve, pero amarga. Había más “cargos directivos” que militantes. Entre esos militantes estaba quien esto escribe. Al final, todo se reducía hacia la catalanofobia, al menos en Cataluña. Los resultados en Cataluña de UPyD son testimoniales, pues, ya hay substitutos como Ciudadanos y el PP, ambos se aferran a la Constitución y a la unidad de España como si fuese de obligado acatamiento. Sólo se puede estar juntos si cada uno elige libremente estarlo. La posible consulta para el 2014 ha hecho que partidos como UPyD salgan de su marginalidad para explotar su vena patriótica. Además, su voz es puesta en resonancia en los medios afines a la extrema derecha y a la derecha sin más.


CHEMA MOYA (EFE)

Quiero esa consulta. Como demócrata aceptare el resultado que salga, pues, esa es la esencia de la democracia: la aceptación de los resultados en las urnas. Sin embargo, UPyD quiere que esa consulta no sea posible. ¿Por qué le da miedo esa consulta? Nos dicen que ha sido reele-gida con una “unanimidad norcoreana” (Muñoz Molina), cualquiera se presenta como alter-nativa, todos saben que UPyD sólo es ella.

dissabte, 13 d’agost del 2011

UPyD no quiere entrevistas

El jueves en un reportaje de El Intermedio de La Sexta con Wyomin y Gonzo en tareas de reportero intenta hablar con Rosa Díez. No hubo manera. Intento hablar con ella en una acto sobre "Regeneración democrática" en la que participaba con Mario Vargas Llosa. A las preguntas -en plena calle- el resultado era un mutismo ensordecedor. En el interior donde se celebro el acto, dificultades mil para intentar arrancar alguna declaración. Nada.

Viendo el espectáculo, me sentía avergonzado de haber creído en un partido UPyD  que debía haber sido una tercera fuerza política en España. La experiencia personal en UPyD fue simplemente desoladora y lo único que se salvó fue haber conocido algunas personas entusiastas. Así que después de ver el mutismo soberbio de Rosa Díez me parece increíble mi ingenuidad. ¡No aprendere nunca!