A mí me recortan un complemento de 625 € mensual brutos, mientras que a Rodrigo Rato se le plantea si debe cobrar –tiene derecho- los 1,2 millones de € de indemnización por la gestión al frente de Bankia. ¿Servirán esos 625 € para cubrir el agujero de Bankia? ¿A quién pretenden engañar? Sacrificios, piden nuestros políticos. Pero no se lo piden a todos, sólo a los que tenemos rentas del trabajo, a los otros, a las rentas de capital, se les deja tranquilos. Los bancos viven tiempos revueltos, pero con ganancias millonarias para unos pocos y socialización de pérdidas para todos. Es la lógica del capital.
Exijo que el Sr. Rato y todos aquellos consejeros de bancos intervenidos que aprovechan estos tiempos convulsos para jubilarse cobren íntegramente sus bien ganadas pensiones. Porqué, de lo contrario, debería pensar que esas relaciones contractuales por las que se les permite retirarse, son fraudulentas y entonces la fiscalía debería actuar de oficio para determinar si existe fraude masivo en todas estas operaciones en perjuicios de terceros. La lógica del capital exige que se cobren estas indemnizaciones. Alguien puede pensar que no es ético, pero aquí no hay nada ético; hay una lógica que supone que unos ganan –muchísimo- y otros pierden –casi todos-. El problema no son estos “genios” de la finanzas, sino quienes tienen el deber de regular estos mercados, es decir, nuestros gobernantes. La falta de coraje político y cívico está llevándonos al desastre. ¿Qué pasaría si España fuese intervenida? La pregunta está mal planteada porque ya estamos intervenidos, ¿es qué nuestros representantes aún no se han dado cuenta?
