divendres, 23 de juny del 2017

Reseñas: Don Delillo, Mao II

Reseña: Don Delillo, Mao II, col.Austral, Barcelona,2013.

La literatura de Don Delillo, no es fácil. Lo hemos comentado en otras ocasiones, y en esta novela (1991), tampoco es la excepción. Si uno mira la contraportada del libro, dan una sinopsis breve, pero eficaz. Sin embargo, se pierde lo esencial. Los detalles. La novela traza diferentes líneas donde el autor desarrolla a sus personajes, el escritor maldito y obsesionado por su labor creativa, dos personajes que viven a la sombra del escritor (Bill Gray), Scott, interesado, en sí mismo y Karen una chica con una vida errática, en busca de un camino que parece no encontrar.

En la novela aparecen el ojo de Brita Nilsson, fotógrafa que se dedica a fotografiar escritores.  El ojo de Brita, penetra en el santuario que se ha convertido la casa de  Gray.

¿Qué hace que una novela se pueda dar por finalizada? En la novela aparece este dilema de manera obsesiva por parte del protagonista. Bill Gray parece que no quiere darla por finalizada. Lleva años puliendola, reescribiéndola, en una espiral interminable. El propio Bill es incapaz de dar por terminada su obra. Ello le obligaría a replantearse su propia actividad como escritor y persona.

El mundo de Bill Gray empieza a desmoronarse cuando después de Brita, le llama su editor Charle Everson, le habla de ese libro que no se acaba nunca, pero también de un secuestro en Beirut. Quiere que Bill se involucre, su nombre tiene peso, para su liberación.



Bill, acepta hablar con Charle, y sale sin decir nada a sus ayudantes. New York, Londres. Su desaparición deja a la intemperie a Scott y Karen. Buscarán a Bill infructuosamente. Karen va en busca de Brita, no se le ocurre otro sitio a dónde ir. Brita no tiene ni idea de dónde haya podido ir Bill. Karen se sumerge en otro mundo, muy cercano a Submundo.

Entre los secuestradores y Charle Everson, aparece como intermediario George Haddad. Vive en Atenas. Conoce la zona. Beirut. Un hervidero de grupos y grupúsculos cada uno haciéndose la guerra por su cuenta. Haddad le dice a Bill:

“-No. El terrorista como proscrito solitario constituye puramente un mito. Todos estos grupos se encuentran apoyados por gobiernos represivos.(…) Conservan la vieja perspectiva delirante de la destrucción total y el orden total.”. (pág.214)


Bill Gray se embarca a un destino desconocido. Bill desubicado en un mundo enloquecido. Dejo para el lector que descubra el final. Brita y Bill aparecerán en Beirut. Mientras tanto Scott y Karen, se sienten en la obligación moral de esperar, a Bill, aunque sea hasta el fin de los tiempos.



Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada