dilluns, 31 de maig del 2010

Estampas



Llama la atención las fotografías donde aparecen Montilla y el ex president Pujol tocados con sendos sombreros para mitijar, supongo, el sol abrasador que iluminaba sus fiestas partidistas.

Habría que decir que tal vez no aguntan demasiado los rayos solares. En su caso se entiende, uno por estar encerrado en el despacho solventando la crisis y el otro porque ya tiene una edad.


Tal vez ser "President de la Generalitat" quema en exceso. Hay que pensar en los sinsabores que los acompañan, la STC o la decepción que debe sentir Pujol por la suerte de sus dos amigos en apuros por los casos Pretoria o el asunto Millet.


Lo cierto es que ambos resultan risibles, unos cowboys desubicados, rídiculos, pero entrañables. La política no es solo legislar contra las rentas del trabajo, también requiere de estampas como las comentadas que nos acercan no a los cargos que representan, sino a las personas.

dilluns, 24 de maig del 2010

¡Qué enciendan las luces, la fiesta se ha acabado! (I)

¡Qué enciendan las luces, la fiesta se ha acabado! Eso es lo que  ha dicho Rodríguez Zapatero ante las presiones del mercado. Y como no podía ser menos la política ha cedido a las presiones del mercado. Ese nuevo eufemismo para indicar una nueva estrategia donde la política cede, mejor, retrocede, ante las envestidas de la economía.

A pesar de los pesares, el presidente del gobierno, ha decidido tomar medidas. Algunos ya han dicho que llegan tarde, mal y además son insuficientes. Los gobiernos europeos se felicitan por la nueva estrategia llena de coraje y buen sentido. Pero lo cierto, es todo lo contrarios.

Los gobiernos europeos, o sea, Alemania y Francia, además del Banco Central Europeo, nos han indicado la hoja de ruta para los próximos años. La palabra mágica que hay que conjugar es reducir. En los gastos, sean estos de sanidad, de prestaciones sociales, en infraestructuras, en investigación, etc. Al parecer nuestro problema es que gastamos demasiado. Íbamos de ricos y nos han dicho que eso ha estado bien mientras duraba, pero ahora toca gastar menos.



Si los índices dicen algunas cosas es que nosotros –España- estamos en las posiciones menos favorecidas con respecto a nuestros vecinos. ¿Por qué deberíamos renunciar hacía la convergencia con los países delanteros?

Los gobiernos europeos atentos a los vaivenes de la economía han pensado que si lo sucedido a Grecia sucediera en España, las consecuencias para el euro serían funestas. Por ello, ahora de lo que se trata de hacer es una defensa numantina para rechazar los movimientos especulativos que provienen de no se sabe dónde y que atacan nuestra moneda –el euro- y nuestro bienestar. Y los gobiernos europeos no han sido capaces de detectar esos movimientos especulativos –el capital es líquido- que provienen de esos “mercados” que vaya a saber de dónde provienen. Seguramente no provienen de países pobres, así que la lista debe ser relativamente corta. Es verdad que el capital no tiene patria. Ahora circula por nuestras economías globalizadas. Las operaciones se realizan en tiempo real pero los operadores parecen ser invisibles, pues, nos dicen, seriamente, que no pueden ser ubicados en el espacio. ¡Deben operar en Utopía!

El gobierno de España como les gusta anunciarse en los anuncios institucionales, ha puesto manos a la obra. Las medidas no han sido someter a los bancos y entidades de crédito a una racionalidad en sus acciones. Por ejemplo, obligándolas a otorgar créditos a la pequeña y mediana empresa. Las grandes empresas están ya asociadas con los bancos. Eso es jugar con ventaja. Lo que hace el gobierno de España ha sido una declaración de principios: antes los mercados que los ciudadanos.

¿Es posible que los ciudadanos tengamos que pagar los costes de la crisis financiera? En las próximas elecciones mirare muy atentamente los programas para saber si piensan aumentar la edad de la jubilación, aumentar los años cotizados, reducciones en los gastos del bienestar, porque de esta manera sabré que no votaré por aquellos partidos que abandonan a sus ciudadanos y en cambio se desviven por los mercados.



El problema es que el capital es traicionero. Ahora las estrategias han de ser globales. No basta que un estado intente medidas para limitar el poder a los mercados, pues, el capital se trasladará a otros paraísos. Faltan políticos que sean capaces de hacer frente a los desmanes de la economía. Decía Vaclav Havel que “la política es, simplemente, un trabajo que requiere individuos genuinamente puros, puesto que al desarrollarlo podemos ensuciarnos moralmente con especial facilidad” (Discursos políticos).

Aquí la palabra clave es “genuinamente puros”. Si no lo he entendido mal, significa que ante los desmanes de los movimientos especulativos del capital financiero, los políticos deberían preguntarse ¿a quién sirven? No sirven a los mercados, sino a los ciudadanos. Son estos quienes deben estar protegidos. La economía real se haya presa de la economía especulativa y no parece que nuestros gobernantes hagan nada. Eso significa que deberíamos despedir a aquellos gobernantes que no son capaces de idear estrategias globales para defender a los ciudadanos de los ataques bien reales -porque dejan a miles de parados en la calle - y que protagonizan los “tiburones especulativos" cuyo paradero se llama Utopía.


dissabte, 15 de maig del 2010

Cosas que sólo pasan en Madrid (II)


El CGPJ ha considerado a bien suspender cautelarmente de sus funciones al juez de la AN Baltasar Garzón. Los motivos de la suspensión es el presunto delito de prevaricación con relación a la investigación de los crímenes del franquismo. Veremos como acaba esta batalla entre una judicatura ideologizada y un Consejo General aún más politizado. Lo verdaderamente grave del asunto es que las motivaciones son una mezcla de agravios corporativos y luchas entre jueces jaleadas  por  ciertos medios de comunicación allegados al PP y sus alas más extremistas.





Junto a una noticia que hará las delicias de ETA que su archienemigo –Baltasar Garzón-,sea puesto en cuarentena por un asunto del “franquismo” debido a los empeños de un juez instructor –acabará sentándose en el banquillo por prevariación-,y un grupúsculo de la extrema derecha, la realidad nacional se mueve en otra dimensión.

ZP ha conseguido lo imposible: que su presidencia de la UE sea la más invisible de cuantas hayan presidido cualquier presidente de turno. Alemania y Francia se han encargo de decirnos a todos quienes son los países más poderosos. EL caso de Grecia como excusa y la posterior envestida de los mercados está haciendo tambalearse a la UE.

El mercado quiere la ruina social de los países y la respuesta de la UE es seguir a pies juntillas las recetas monetarias. Hubo un rescate de los estados –parece que se ha olvidado- para salvar a las entidades financieras de su avaricia. Se habla del nuevo delito que lo países han cometido: El endeudamiento. Todo parece indicar que depende de quien tenga la deuda está puede aparecer como un problema. Los PIGS cargan ahora con las culpas de todos los males. Hay culpables y negligentes. La crisis financiera surgió en EE.UU y se amplio al resto de mercados debido a la codicia de las entidades que no son controladas por nadie. Después vino su desplome y posterior rescate a unos costes desorbitados. Los gobiernos europeos han aprobado hasta ahora 3,77 billones de euros en ayudas a sus sistema financiero, más que el PIB de Alemania, según documentos de la Unión Europea a los que ha tenido acceso Bloomberg. (12/06/2009)”.





Ahora, los mercados parecen “preocupados” por la suerte de los que tienen que asumir las pérdidas, es decir, los estados. Será por esto que los mercados pretenden acabar la estabilidad de los países. Grecia ha sido el primero. Pero no parece que vaya a ser el único y como el miedo es contagioso los demás países aceleran sus “reformas”. España se ha colocado en el punto de mira de los mercados. El eufemismo de los “mercado” como si fuesen una entelequia inasible hace que las entidades financieras y los mercados de capital riesgo y asociados traten de sacar partido a un mercado financiero cada vez más alejado las necesidades y preocupaciones de la sociedad.


Lo irritante es que los miembros de la UE sean incapaces de hacer frente a los ataques de los mercados, cuando estos han sido respaldados por los estados. Al parecer EE.UU no tiene deuda alguna. Pero sus dirigentes se permiten hacer llamamientos a los demás para “apretarse el cinturón”.  Mientras que su propio déficit es gigantesco.

Según el informe del Banco de España en su Boletín de estudios del mes de abril afirma lo siguiente:”En el ámbito fiscal, los últimos datos proporcionados por los Estados miembros de la UEM acentúan el deterioro de las finanzas públicas en 2009, con un déficit público para el conjunto del área del 6,3% del PIB, 4,3 pp superior al de 2008. Para el año 2010, la agregación de los planes de estabilidad indica un ligero empeoramiento de los saldos presupuestarios, consecuencia principalmente del mantenimiento del estímulo fiscal por parte de Francia y de Alemania, que pospondrían la corrección de sus déficits al período 2011-2013. Por el contrario, los países con saldos negativos más abultados —Irlanda, Grecia, Portugal y España— han presentado planes de estabilidad que proponen ya para el año en curso consolidaciones ambiciosas. En este momento, trece de los dieciséis países de la UEM están sometidos al Procedimiento de Déficit Excesivo, siendo de particular relevancia el caso de Grecia, cuyo déficit y volumen de deuda se situaron, respectivamente, en el 13,6% y el 115% del PIB en 2009.”



Si la deuda es alta hay que tener en cuenta que se produce un efecto de transferencias tal como explica el profesor Mochón: “La existencia de la deuda del sector público implica la transferencia de fondos de un grupo social, contribuyentes que financian los pagos de intereses, a otros en el mismo momento, y no una transferencia entre personas de un período a otro.”. Se exceptúa “cuando los que detentan los títulos públicos y reciben los intereses son residentes extranjeros, si tiene lugar una transferencia neta de renta” (Mochón,F., Economía.Teoría y política. 2ed.MacGraw-Hill).

¿Por qué los mercados se rasgas las vestiduras? Por qué según la formulación clásica de la política monetarista –neoconservadora-, los inversores que van al sector público detraen capital que no puede captar las entidades privadas. EL problema es que si la bolsa es hoy una auténtica ceremonia de la confusión, por no decir unos auténticos casinos, los pequeños inversores o han perdido una parte importantísima de su capital o bien lo tratan de colocar ya que no en el mercado inmobiliario, si en el sector de la deuda.

Todas estas turbulencias tienen que ver con el descontrol de los mercados financieros. Los países de la zona euro no han podido, porque cada uno mira para su propio patio, establecer mecanismo que puedan disciplinar unos mercados cada vez más incontrolables, y que tienen como consecuencias la toma de medida por parte de los gobiernos de planes restrictivos para los sectores de las rentas del trabajo. Se nos dice que hemos vivido por encima de nuestras posibilidades. Seguramente es verdad, pero no todos los sectores pueden decir eso. Las rentas del trabajo y los costes laborales en España a pesar de la retórica partidaria está lejos de los países que son nuestra referencia. ¿Acaso queremos competir con países como Polonia, Eslovenia o Rumanía? Seguramente nuestra patronal les encantaría que España se colocase junto a estos países en cuanto a salarios.

Nuestro gobierno está haciendo las cosas mal y tarde. Para compensarlo ahora trata de sobreactuar a base del anuncio de medidas drásticas que perjudican a las rentas del trabajo y a los pensionistas. ¿Los pensionistas deben apretarse el cinturón? Sólo se me ocurre a uno que no necesitará apretarse el cinturón. En la izquiedista  “El economista.es”, nos dice:” la pensión resultante -hace referencia a su presidente el señor Francisco González -, cuya cuantía asciende a 79 millones de euros -engloba las cantidades provisionadas durante su trayectoria de 14 años al frente de BBVA- se congela en una póliza de seguros cuyas prestaciones no podrán ser percibidas hasta que el presidente del consejo cese en sus funciones ejecutivas.Los estatutos de BBVA dictaminan la edad máxima de jubilación para su presidente en los 70 años.

Al menos habrá un jubilado que llegará a fin de mes. Me olvido de que hay dos cargos públicos que pasan apuros económicos. El del PP el señor Rajoy que se quejaba que con sus cerca de sies mil euros mensuales no llegaba a final de mes  y el calamitoso señor Camps que a pesar de las remuneraciones por su condición de presidente de una CC.AA no tiene literalmente nada en ningún lado. Seguramente porque el último capricho que tuvo, comprarse unos trajes le está saliendo más caros de lo que había previsto.

dilluns, 10 de maig del 2010

La barbarie siempre tiene forma humana


La nueva entrega de Henning Mankell y su detective Wallander, titulada “La pista falsa” se adentran en esta nueva historia en un grado más de barbarie y crueldad.

Las historias se entrecruzan entre las vidas de la alta sociedad sueca y los bajos fondos. Los extremos se tocan. Las muertes violentas de un ex ministro de justicia, Wetterstedt, la de un marchante de obras de arte, Arne Carlman, la de un delincuente de poca sustancia, llamado Björn Fredman, y la de un personaje Ake Liljendren, dedicado al mundo de los negocios, llevan a Wallander y a su equipo a situaciones límite.

Además, el suicidio en un campo de colza de una joven cuyo nombre descubrirán: Dolores María Santana, ante la impotencia de Wallander para salvarla, hace que reflexione sobre la vida y la muerte. ¿Cómo es posible que alguien con toda la vida por delante acabe con su vida? “Vivo en un mundo donde los jóvenes se quitan la vida porque no la soportan”. “Si voy a seguir siendo policía tengo que entender el porqué”.(pág.68)

El modus operandi del asesino en serie parece sacado de un película de serie B americana. ¿Es posible que ese “modus operandi” sea un pista falsa? Una forma de llevarnos lejos del verdadero culpable? Wallander sufre ante esa posibilidad. A medida que los muertos se van acumulando y las pistas parecen que retratan a unos personajes oscuros y con secretos inconfesables las posibilidades se hacen cada vez más débiles e inconsistentes.

La aparición de un asesino en serie lleva a Wallander a buscar pistas en todas las direcciones. Los problemas domésticos siguen sus propias dinámicas. Un padre cada vez más viejo, un hija que no sabe qué dirección imprimir  su vida y una relación difícil que se ve agravada por la distancia hacen que Wallander se sitúe siempre al borde un ataque de nervios.

Wallander reflexiona como en la plácida Suecia pueda ocurrir algo semejante. Mankell/Wallander dibuja un mapa sociológico: “Pero en alguna parte durante los años cincuenta hay una línea divisoria.Es invisible, pero está ahí. Había meios ilimitados para construir y acabar con los restos de la pobreza. Y al mismo tiempo se produjo un cambio en la vida política. Los políticos se convirtieron en profesionales. Ambiciosos profesionales. Antes, el idealismo había sido el elemento dominante de la vida política. Entonces ese idealismo empezó a diluirse” (pág.237)

Wallander utiliza a todos los efectivos de la policía para rastrear cualquier posible indicio acerca de la identidad de un asesino que utiliza una violencia extrema. En esas acciones hay algo personal. A lo largo de la historia nos enteramos de las motivaciones del asesino.



Las conexiones van apareciendo y se va percibiendo que existe una trama de trata de blancas. Víctimas colaterales aparecen para dar pie en esa dirección. Wallander presiente que los asesinatos tienen algo que ver con todo ello, pero no sabe aún cómo. Estamos mal acostumbrados por las películas a descubrir a los asesinos desde el primer momento. Pero la acción policial empieza precisamente cuando el asesino ya no se encuentra en el escenario del crimen.
El asesino ha dejado huellas, saben que es la misma persona que ha ido asesinado dejando su sello personal. Tarde o temprano encontraran un hilo de Ariadna que los conducirán al asesino sin rostro. Mientras Wallander interroga a  los familiares de la tercera víctima siente un malestar que no logra retener. La familia del asesinado es un reflejo que la sociedad sueca no es lo que aparece ser, una sociedad modélica. Una madre alcoholizada,  un hijo mayor que contesta con precisión a las preguntas del policía acerca de quien podría ser el asesino que ha matado al cabeza de familia. Un niño pequeño cuyos ojos refleja miedo y una hermana que no siempre está de viaje.

“Se preguntó con desconsuelo en qué mundo estaba viviendo. (..). Las ilusiones que se habían forjado resultaban sumergidos en una época que se podría llamar el tiempo de los fracasos. Las ilusiones que se habían forjado resultaron ser menos sólidas de lo esperado. Creían edificar una casa y lo que hacían en realidad era erigir un monumento sobre alfo ya pasado y casi olvidado. Suecia se derrumbaba alrededor de él, como un sistema político de estantes gigantes que se vinieran abajo. Nadie sabía quiénes serían los carpinteros que estaban en el recibidor esperando entrar para colocar las nuevas estanterías. Tampoco sabía nadie cómo serían éstas.(…) La gente joven se suicidaba, o al menos intentaba hacerlo. (…) Las viviendas eran escondites más que hogares acogedores. Y los policías estaban callados esperando el momento en el que vigilasen sus celdas de arrestos unos hombres con otros uniformes, los hombres de las empresas privadas de seguridad” (pág.295-6)

Wallander siente la fragilidad de los jóvenes cuando tiene que presenciar un suicidio atroz y además una de las hijas de uno de los asesinados intenta suicidarse. El mundo esta cambiando y Suecia con ella. Esos cambios no le gustan porque no entiende como es posible todo lo que esta pasando a su alrededor.

Acabo, la literatura tiene la ventaja de que puedes inventar una realidad atroz en un mundo perfecto. Y al revés, puedes inventar una realidad perfecta en un mundo imperfecto como es el nuestro. No explico el desenlace. Las pistas acabarán llevándole a una dirección que Wallander no quería ver. Por supuesto, la realidad supera siempre a la ficción. Por ello, Mankell tiene espacio para reflexionar sobre la condición humana y las instituciones sociales que hacen que nuestras sociedades sean habitables. Wallander se plantea cómo podría ser una policía que en vez de esta al servicio de la sociedad estuviera al servicio de empresas cuyo objetivo sería la rentabilidad. 

dissabte, 8 de maig del 2010

Dar la cara



Estos días los periódicos nos han informado del transplante de cara que un ciudadano cuyo nombre es Rafael, ha sido sometido a dicha intervención debido a una enfermedad congénita que le afectaba gravemente la cara. La enfermedad es una neurofibromatosis de tipo 1. Las imágenes son lo suficientemente explícitas sobre las condiciones en las que ha padecido esta persona.

La primera idea que me viene a la mente es que si era una enfermedad congénita la primera persona que lo acogió fue su madre. ¿Qué debió de pensar? ¿Cuánto esfuerzo por controlar el pánico de encontrar delante de ella a un bebé que no era como los demás? ¿Cuánto sufrimiento habrán padecidos los padres? ¿Cuánto habrá padecido esa persona que no ha podido tener una vida normal?



¿Es concebible que en la actualidad y con los medios científicos se deje nacer a alguien con las deformidades que padecía esa persona? Antes de los conocimientos médicos lo natural era que surgieran casos de esta índole. La esperanza de vida de estas personas era prácticamente nula. Sin embargo, a medida que la ciencia médica se ha hecho más sofisticada, ¿qué sentido tiene dejar a una persona en esas condiciones?

Es evidente que entramos en terrenos complejos y accidentados. ¿Si soy creyente, puedo aceptar que Dios me envié una prueba de mi fe? ¿Puedo aceptar y querer que ese hijo/a mía nazca en esas condiciones, cuando se puede evitar? Desde luego para mí la respuesta es muy clara.

Hemos visto su “nueva” cara. La cirugía plástica hace milagros. No sé si tendrá que volver al quirófano para nuevos arreglos. En una sociedad donde prima lo estético, su deformidad es un recordatorio de lo subjetivo que es la etiqueta de belleza y fealdad. 

dissabte, 1 de maig del 2010

UPyD Sabadell (II)

UPyD ha sido una experiencia fallida. Las condiciones en la que se ha desenvuelto en Sabadell desde su inicio ha llevado el marchamo del fracaso. No puede haber partido si antes no hay potenciales militantes, y sin éstos cualquier intento de construir un grupo político está condenado al fracaso. Y ese ha sido el caso de Sabadell.

Recuerdo que asistí a la constitución en Sabadell del partido, no había local, así que se escogió la biblioteca del Vapor Llonch. Éramos tan pocos que da grima pensarlo. Había quien ostentaba el mandato del partido, no sé las razones ni las circunstancias de su elección, seguramente, era el único que se había propuesto. El problema de base es que no conocía la ciudad, aunque trabajará en ella. La reunión me hizo recordar como debían de ser las reuniones de los cristianos en la época de los romanos. Un grupo pequeñísimo en medio de un mar de partidos consolidados y llenos de espíritu nacionalista, mientras que nosotros éramos seis personas dispuestas a echar adelante un proyecto no nacionalista.

La reunión se llevo acabo como muy buena voluntad, pero no basta, se requiere algo más. ¿Cómo llevar un mensaje diferente sin medios? Se propuso diferentes estrategias. La consolidación del partido nunca llego a consolidarse. El anterior responsable de Sabadell, dimitió o lo dejó, nunca supe las razones de su desaparición, sin embargo, su hueco pudo rellenarse con otro nuevo responsable que si vivía en Sabadell, y además tenía un deseo extraordinario para llevar adelante el proyecto.

Recuerdo la reunión que significó el nuevo arranque del proyecto, dos personas jóvenes con ilusión se pusieron manos a la obra. En esa reunión, también en la biblioteca el Vapor LLonch, se desarrollo un pequeño drama, en el que uno de los miembros, un veterano, o sea, una persona ya de cierta edad, acabó dando un portazo porque le había planteado dudas acerca de la existencia de que vivíamos en una dictadura. El caso, es que el militante anunció que lo dejaba, y descalificándome urbi et orbi. El nuevo responsable del partido, tuvo que llamarlo al orden. Éramos cinco personas, así que el desastre era colosal.

Nuestra actividad se desarrollo en diversos frentes, éramos tres personas, a veces llegábamos a cuatro o cinco, en ese desarrollo, nuestra actividad se hizo milagrosamente fructífera, se creó un blog que ayude a crear y que quien lo desarrollaba hizo una labor extraordinaria. Nuestro partido estuvo presente en los actos de l’ Aplec de la Salut, así como en los actos de campaña para las europeas repartiendo propaganda en el mercadillo de los domingos.



Este despliegue se concretizó en la puesta de largo del partido en Sabadell con un acto público de presentación ciudadana, con la asistencia de la directiva de Cataluña y algunas personas que fueron a la presentación del partido. Tuve el honor de participar en una conferencia que había preparado con mucho cariño sobre la educación y su papel en una sociedad democrática.

A pesar de las buenas intenciones nuestro partido no lograba atraer más militantes. No era fácil. Seguimos con nuestro blog, de los que he visto, y sin ánimo de ofender, era mucho mejor que el de la mayoría de nuestros compañeros de otras localidades. El mérito era de sus responsables que dejaron la piel en ello.

El principio del fin fue el I Congreso de UPyD en Madrid. La elección de delegados para asistir fue el desencadenante de la dimisión de quien hasta ese momento había sido su responsable. Me confeso que lo habían engañado. Seguramente era demasiado joven e ingenuo para estar preparado para estas situaciones. La cuestión es que a raíz de ello, dimitió de su cargo, dejando huérfano a UPyD en Sabadell.  La deriva de todo ello ha sido que antiguos miembros de Ciudadanos han acaparado la dirección en Cataluña. La candidatura de Robles por UPyD en Cataluña hizo evidente lo que se venía venir, solicitando mi baja en el partido. Así de triste ha sido mi participación en la acción política. No he dado sus nombres porque no he pedido permiso para que salgan aquí. Ha sido una experiencia interesante y me alegro de haber participado en ella, he conocido a personas que han puesto mucho mayor compromiso que el mío. Y en muchos aspectos siempre estaré en deuda con ellos.

Una de las primeras consecuencias fue la desaparición del nuestro blog en los enlaces del partido. Sus responsables eran tan amables que incluían algunos artículos de mi blog. Su desaparición me pareció un mal augurio de lo que acabaría pasando. Se dinamito el partido en nuestra ciudad. Sin embargo, el  número de cargos burocráticos seguía creciendo. No había militantes de base, pero se multiplicaba la lista de cargos en Cataluña. La estrategia sensata hubiera sido la contraria. Captar militantes, crear una base lo suficientemente sólida para crear un partido. Pero eso no ha sido posible.

En este mismo blog, he hablado y seguiré hablando de la actualidad política, remito a quien tenga el humor y la paciencia de seguirlo para repasar lo que dije en su momento acerca de un partido como UPyD que si sigue por esta vía no llegará a ningún sito, al menos en Cataluña. Y mucho me temo que en el resto de España la elección del voto útil haga de él un partido testimonial al estilo de IU.


dilluns, 26 d’abril del 2010

El hombre sonriente.


La novela de Mankell  titulada “El hombre sonriente” aborda una nueva temática. ¿Qué tipo de personas hay detrás de las grandes corporaciones? En esta nueva entrega Wallander  se enfrenta a un nuevo tipo de criminal. Éste ya no es el clásico delincuente si no que estamos delante de una tipología nueva. Aquel que tiene poder y cree que pueda hacer cualquier cosa porque está por encima de toda sospecha.

El punto de arranque de la novela es la muerte de un abogado, Gustatf Torstensson. En la investigación preliminar se determina que ha sido un accidente. Wallander que ha pasado por un infierno personal debido a los acontecimientos provocados por su anterior investigación en la que tuvo que hacer frente a un asesino implacable y, para defender su vida, tuvo que matar. Éste hecho lo llevó a una profunda depresión pensando seriamente en dejar la policía.

En las playas de Jutlandia, en Skagen, intentando asimilar su experiencia traumática, es abordado por el hijo del abogado muerto aparentemente en accidente, Sten Torstensson, que conocía a Wallander. Le confiesa sus dudas acerca de ese accidente. Tiene el presentimiento de que detrás de ese accidente haya algo más pero no tiene ni certezas ni pruebas. De la conversación que tienen detecta miedo.

Cuando Wallander se reincorpora a la policía y se ve inmerso en la  investigación del presunto accidente del padre  de Sten Torstensson. Poco después es asesinado Sten  en su despacho de un tiro en la cabeza. A partir de aquí, empieza a pensar en la conexión entre el accidente el padre y el asesinato del hijo. Reconoce el lugar del accidente y descubre accidentalmente la pata de una silla. A partir de ahí, toma conciencia de que el presunto accidente no era tal.





Las pesquisas llevan a una conclusión: la causa de la muerte del padre y el hijo tienen que ver con su actividad profesional. Gustatf Torstensson tenía como cliente exclusivo a un magnate de la industria, Alfred Harderberg. Es a partir de aquí que Wallander intentará establecer nexos de conexión entre estas muertes y el magnate. Este vive en el castillo de Farnholm. El magnate atiende a sus negocios por todo el mundo. La economía global hace que los negocios, las oportunidades se encuentran en cualquier parte del mundo. Por ello necesita estar en permanente movimiento. Wallander llama al castillo para concertar una entrevista con el magnate.

La visita finalmente se realiza y en medio de la entrevista Wallander entrever la posibilidad que el culpable de esas muertes sea quien tiene delante a pesar de la falta de pruebas. La sonrisa que exhibe el magnate le parece un a Wallander un signo de culpabilidad  y por ello tratará por todos los medios que esa sonrisa se le borre de la cara.

La investigación adquiere unos perfiles borrosos, las pruebas son poco claras, se rastrea cualquier conexión entre el despacho de abogados y Alfred Harderberg. El jefe de Wallander, Björk, así como el fiscal, le piden que vaya con cuidado, pues, delante tienen a un prohombre de las finanzas suecas. En una de las entrevistas a la antigua secretaria de los abogados asesinados la señora Dunér, Wallander descubre una mina en el jardín de la señora Dunér. El listín telefónico será la prueba que confirma que han puesto una bomba. La inquietud se adueña de la investigación. Además Wallander y Ann-Britt Hölglund son vigilados por un coche mercedes cuando acuden a una entrevista para seguir una de las pistas. En ella aparece el nombre de Lars Borman, que había aparecido en la investigación. Sin embargo, éste había muerto, oficialmente se había suicidado. Era auditor de cuentas y había investigado un desfalco en la administración. Wallander tiene la convicción que todos cabos sueltos de la investigación debían tener su origen en el castillo de Farnholm y a Alfred Harderberg quien los movía.

¿Por qué alguien  que  tiene poder económico y social puede ser el instigador de los asesinatos?  Los hechos, excepto, la muerte de Gustatf Torstensson, Harderberg se hallaba fuera del país. ¿Podía ser alguien ajeno al castillo? Wallander creía que no. Había que seguir buscando, pero el tiempo para investigar se estaba acabando.

Logran introducir a alguien en el castillo. Y esa voz dará una señal que marca el principio del fin para la investigación. En el castillo se preparan las maletas para marcharse. Wallander lo interpreta como un signo más que van por la buena dirección. No voy a seguir contando lo que sucede.

Finalizo, Henning Mankell es un escrito que utilizando un género literario, la novela negra, va más allá de ella, para hacer un análisis de su sociedad, la sueca, y por extensión, nuestra sociedad. Sus radiografías son una buena muestra de lo que le sucede, de las paradojas a las que se enfrentan, de los dilemas morales en los que se ven envueltos los protagonistas, especialmente, Wallander, hacen de Mankell un autor de primer orden. Además, son aditivos, por ello conviene atenerse a las consecuencias, si empiezas, después no vale quejarse de que no hay manera de dejarlo. ¡Quién avisa no es traidor!