Els símbols són més resistents que les humiliacions

Quan arriba la penombra (Cuando llega la penumbra)

Jaume Cabré, Quan arriba la penombra. A tot vent 669, Proa, Barcelona, 2017.

Aquesta col·lecció de contes, tal com ell ho diu, tenen “una atmosfera comuna” (pàg.276), i aquesta és, les històries de mort i assassinats, escampant per els relats.

Això sí, hi ha referències a la pintura, a l’escriptura, els clàssics,, això que és diu art. Maten per un quadre, o un llibre, però també, per venjança, què com diu el tòpic, s’ha de servir sempre freda.

En un petit fragment, hi ha una mena de compendi d’estètica: “ Algun company imprudent va dir però això és literatura i no art, oi? La Granell li va somriure i va dir-nos a tots, però mirant-lo a ell, si el miracle s’esdevé mitjançant les paraules, en diem literatura; si s’esdevé etèriament durant un temps concret, en diem, música; i si el miracle s’esdevé en un espai material concret, en diem pintura, fresc, retaule, escultura... I si el miracle és l’espai que crees, en diem arquitectura. El cas és que hi hagi un miracle.” (pàg.257).

Personatges inquietants, cap dels assassins, és simpàtic. Caps sembla que s’empenedeixi del que ha fet. Sembla que són prou fatxendes per estar-hi contents del que han fet. També hi ha malsons. Potser es un preu força petit per el que han fet.

Parla en el epíleg –molt important-, de contes “supervivents” (pàg.276), perquè en un recull com aquest, l’autor no ha posat altres contes que té al calaix de la taula i què no veuran la llum del dia. Potser si que valdria la pena que també aquest poguéssim sobreviure.

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[Esta colección de cuentos, tal como él lo dice, tienen "una atmósfera común" (pág.276), y ésta es, las historias de muerte y asesinatos, esparciendo por los relatos.

Eso sí, hay referencias a la pintura, a la escritura, a los clásicos , eso que se llama arte. Matan por un cuadro, o un libro, pero también, por venganza, que como dice el tópico, se debe utilizar siempre fría.

En un pequeño fragmento, hay una especie de compendio de estética: "Algún compañero imprudente dijo pero esto es literatura y no arte, ¿verdad? La Granell le sonrió y dijo a todos, pero mirando a él, si el milagro ocurre mediante las palabras, lo llamamos literatura; si ocurre etéreamente durante un tiempo concreto, lo llamamos, música; y si el milagro ocurre en un espacio material concreto, lo llamamos pintura, fresco, retablo, escultura ... Y si el milagro es el espacio que creas, lo llamamos arquitectura. El caso es que haya un milagro. "(pág.257).

Personajes inquietantes, ninguno de los asesinos, es simpático. Ninguno parece que se arrepiente de lo que ha hecho. Parece que son bastante sobrados para estar contentos de lo que han hecho. También hay pesadillas. Quizás es un precio bastante pequeño para lo que han hecho.

Habla en el epílogo -muy importante-, de cuentos "supervivientes" (pàg.276), porque en una colección como está, el autor no ha puesto otros cuentos que tiene en el cajón de la mesa y que no verán la luz del día. Quizás si que valdría la pena que también estos pudiéramos sobrevivir.]

Chistes para ilustrar problemas filosóficos (II)

Esencialismo (esencia)

Aristóteles (330-323 a.C.) fue el primer autor que se preocupo por definir los conceptos que trataba. Afirmaba que las cosas (entes) poseían dos aspectos: materia y forma. Ambos inseparables en el orden de la naturaleza (physis). Cada ente es una substancia, que podía a su vez ser contemplada desde la esencia (aquello que la cosa es lo que es y no puede ser de otra manera) y accidente (por ejemplo, que el hombre sea alto, o bajo, negro, o chato, es decir, que si uno u  otro aspecto falta, no altera la cosa). Ejemplo que lo ilustra:

Cuando Thompson cumplió los setenta, decidió cambiar completamente su estilo de vida para vivir más años. Se sometió a una dieta muy severa, daba largas caminatas, nadaba y tomaba el sol. En tres meses, Thompson perdió cinco kilos, redujo quince centímetros el perímetro de su cintura y aumentó doce centímetros de pecho. Esbelto y bronceado, decidió dar el toque final a su aspecto con un corte de pelo deportivo. A la salida de la peluquería, le atropelló un autobús.

—¡Dios mío! —gritó cuando yacía moribundo—. ¿Cómo has podido hacerme esto?

—A decir verdad, Thompson —dijo una voz que procedía del cielo—. ¡No te he reconocido*!

PD: El chiste tiene su gracia, porque cuestiona la omnisciencia de Dios, al no haber reconocido al pobre Sr. Thompson.

* Thomas Cathcart y Daniel Klein, Platón y un ornitorrinco entran en un bar... La filosofía explicada con humor. Trad. Núria Pujol Valls, Editorial Planeta 2ªed. Barcelona, 2008.

La sinrazón

¿Alguien puede explicarnos por qué la obsesión enfermiza de querer ver a ETA en Cataluña? El entrecomillado, supone que alguien ha hablado, pero no dicen quién. Un anónimo habla de que "ya es peor que el País Vasco", supongo que debe de ser ahora, porque si fuera cuando los guardia civiles eran objetivo de ETA, sería una infamia. Podía decirnos La Razón ¿cuántos asesinatos de la GC ha habido en Cataluña?

En fin, miseria moral para otra hoja parroquial de la prensa patriótica. 

Recomendaciones musicales

ABC de la posverdad

En una sociedad libre, la prensa tiene como objetivo, buscar la verdad. Si uno observa el titular, se da por verdadero la afirmación de un interrogado en el que todo el sumario está bajo secreto. ABC no ha preguntado a Torra sobre la cuestión,  esa sería la primera tarea que todo periodista haría, pero se da por descontado la veracidad de lo afirmado por un tercero. No existe para Torra ni para los acusados de terrorismo, presunción de inocencia. Se habla de futuros, como hechos probados, se hablada de futuros, para narrar una historia que no ha sucedido, pero que ABC quiere que sean ciertas. La verdad, para el ABC, es lo que quiere este rotativo, criminalizar a la sociedad catalana que vota independentismo. Hoy el ABC parece la hoja parroquial de la guardia civil. ¡Enhorabuena!

Chistes para ilustrar problemas filosóficos (I)

Teleología

La teleología supone la idea de que toda tiene una finalidad, un objetivo que cumplir. El primer avalista de dicha idea fue Aristóteles (330-323 a.C.). Pensaba que todas las cosas (entes) tenían una finalidad que cumplir. Así, por ejemplo, la finalidad de un pájaro es volar, el volcán, erupcionar, en el caso del hombre propuso que su finalidad es la felicidad (eudemonia).  En la actualidad dicha concepción es contraria al conocimiento científico. Como el concepto de teleología supone una concepción abstracta, nada mejor que ilustrarlo con el siguiente chiste:

La señora Goldstein paseaba por una calle con sus dos nietos. Se encontró con un amigo que le preguntó cuántos años tenían. La señora respondió:
—El médico tiene cinco y el abogado siete*.

* Thomas Cathcart y Daniel Klein, Platón y un ornitorrinco entran en un bar... La filosofía explicada con humor. Trad. Núria Pujol Valls, Editorial Planeta 2ªed. Barcelona, 2008.