dilluns, 15 d’octubre del 2012

Cataluña y España

¿Qué pasaría si lo que está sucediendo en Cataluña no fuera más que una espectacular puesta en escena por parte de CiU? Si lo que no quiero que salga –la independencia- la proclamo de forma dramática, siempre puedo conseguir réditos electorales. El gobierno de Mas ha elevado a cotas insospechadas los recortes, muy superiores al cualquier otra autonomía. Con las próximas elecciones del 25 de noviembre CiU aspira, nada menos, que a la mayoría absoluta. La jugada es extraordinaria. Se mata la indignación por los recortes sociales y de paso de sustituye por la idea de una Cataluña independiente. Si se mira la historia de los últimos treinta años, la deriva soberanista es nueva, al menos, en su discurso más electoralista. Los años del pujolismo –peix al cova- y su posibilismo de bajo vuelo, hace que esta nueva etapa sea, de momento, tenida, al menos en Madrid, como puro teatro.



El gobierno central sigue su carrera triunfal hacia el desastre. Cuanto más nos dicen, a estas alturas nadie sabe lo que quieren, porque simplemente quieren que el tiempo transcurra. Galicia es la primera parada para un bálsamo electoral, y de paso confirmar que se va por el buen camino. Euskadi y después Cataluña, son realidades que no acaban de entender y por ser periféricas se les da por perdidas. El problema ha surgido, de donde menos podían esperarlos, sus socios de preferencia CiU, han echado un órdago de dimensiones colosales. ¡Adiós a España! El portazo del Pacto Fiscal, empezó muerto antes de empezar su andadura. CiU debería haber sido más hábil para tender puentes sobre el gobierno de Madrid, pero éste con su proverbial soberbia y torpeza ha ayudado a un distanciamiento, que ahora mismo, se hace muy difícil de reconducir. Así las cosas, ¿qué va a pasar? La respuesta puede ser cualquier cosa. En medio de una crisis de identidad sobre lo que que queremos –Cataluña- y lo que no queremos –España-, y una crisis económica que está asfixiando a las clases medias y bajas, la sociedad catalana se debate entre el día a día, cada vez más pesimista y un horizonte –la independencia- que no deja de seducir a una parte cada vez mayor de catalanes. El gobierno central debería articular medida para no sentirnos agraviados, pero con amigos como Wert y compañía, se hace difícil encauzar este divorcio que se esta dibujando. Además, ¿qué está haciendo Rajoy? ¡Alguien pensaba que cuándo se fuese Rodríguez Zapatero –su figura crece cada vez más-, y Rajoy tomase las riendas de la crisis todos nuestros problemas iban a desaparecer como por arte de magia!

divendres, 12 d’octubre del 2012

Leonora


Acabo de leer “Leonora” de Elena Poniatowska. ed.Seix Barral. Premio biblioteca breve 2011. Su lectura deja una impresión como las huellas en la arena de la playa. Se trata de una biografía de la pintora surrealista Leonora Carrington. En manos de Poniatowska la novela es una radiografía de una época –atroz- que dejo huellas en todos los que la vivieron. La Guerra Civil española, la Segunda Guerra Mundial, Crookhey Hall, México, los sucesos de 1968 en la plaza del Zócalo, Madrid, Santander, Lisboa, Nueva York, París, St.Martin D’Ardèche, una geografía que expresa una travesía en la que se mezcla el amor, la locura, el desamor, y sobre todo, la pintura.


El mundo mágico de los mayas (1963)


En la novela, a través de sus 56 capítulos, se van desgranando la vida de una mujer que no quiso ser de su tiempo, que quería ser inmortal, porque temía a la muerte, su rebelión consistió en pintar: “Lo que pinto es mi nostalgia” (pág.490). Una nostalgia que desde su Inglaterra natal le hará dar una vuelta al mundo de su infancia, llenas de historias mágicas y una voluntad ferra de ser distinta.



Leonora ha vivido tantas vidas como los gatos. “Vivía varias existencias: la de mi niñez, la de mi rebeldía, la de mi maternidad, la de mi pintura” (pág.492). En la novela hay nombres propios, muchos. Max, Renato, Chiki, Edward, Álvaro. Dos experiencias vitales la convulsionan hasta la médula: la experiencia vital con Max Ernest y su ruptura a manos de la policía francesa y posterior encierro en u campo de prisioneros, y su posterior hundimiento en la locura. Santander. Las dosis de cardiazol que la dejan y alejan de este mundo.


Una vida que se expresa en sus pinturas y que en la novela van apareciendo al compás de su experiencia vital. Pintar la vida le hace sentirse invulnerable a la muerte. Estas breve líneas son una invitación para leer esta novela-biografía de una mujer excepcional. Una novela llena de pasión hacia una mujer extraordinaria, ¡acaso no lo es enloquecer de amor! Su pintura nos recuerda que fue una auténtica giganta de la pintura del siglo XX.

dijous, 11 d’octubre del 2012

Castigar a los sospechosos habituales


¡Este gobierno si gobierna! y para demostrarlo nada mejor que echar mano del Código penal. Gallardo, el ministro de justicia, hace alarde, desde su posición iluminada, de performance justiciera. Reformas ad hoc para contentarse ante la falta de poder real en el orden material y práctico. Bruselas, el BCE y el FMI dictan la hoja de ruta de la política socioeconómica. Hablar de política es simplemente un eufemismo. Sólo se gestiona para los mercados dejando a la deriva a los ciudadanos que se sienten impotentes y es a estos que nuestro presidente Rajoy (PP) alaba a los que se callan la boca.



Si el gobierno hace lo que le dicen –al parecer mal, pues, no acaban de fiarse -; en el terreno simbólico y punitivo, se hace gala de una dureza que contrasta con la adaptabilidad que adopta contra la ciudadanía medidas que empobrecen a todos, menos a los ricos y a los bancos. Gallardón quiere demostrar que el castigo es el antídoto de la crisis. Una batería de reformar para endurecer las penas de privación de libertad, cuando el propio Código penal es ya uno de los más duros de Europa. Siempre podremos acercarnos a los sistema punitivos de EE.UU, Rusia o China.


“Delitos económicos. Habrá una nueva regulación de la malversación y una persecución “más eficaz” del fraude y la ocultación de bienes en procesos de quiebras societarias.” (El País, 11-10-2012). He aquí todo lo que piensa hacer el gobierno para solventar el latrocinio de los bancos y cajas que nos han llevado a la ruina y miseria de cientos de miles de ciudadanos. En cambio, Los “hurtos sistemáticos”, como los cometidos por carteristas, que ahora son faltas, implicarán prisión de hasta tres años si se cometen con “profesionalidad”. (El País, 11-10-2012). Es decir, si eres un banco que ha volatizado cientos de millones y que necesita rescates como los de Bankia – banco de los amigos del PP-, de 24.000 millones de euros, el resultado son jubilaciones millonarias y recortes sociales para el resto de la ciudadanía, mientras que los carteristas, mano dura, iba a decir, lo que decía una eminente pensadora del PP: “¡Qué se jodan!”.



Se sigue hablando de delitos de terrorismo. Desde hace dos años no ha habido ningún asesinato político por parte de ETA. No parece descabellado pensar que ETA no tiene capacidad para nada, pero nuestro gobierno, le parece que la escalada terrorista sigue en marcha. Así que habla de endurecimiento de penas en casos de terrorismo. Es un brindis al sol del tendido de extrema derecha y sus servicios auxiliares mediáticos, que no pueden perdonar que el abandono de las armas por parte de ETA se hiciera en el gobierno de Zapatero. Pero, tranquilos ellos seguirán la lucha hasta el final de los tiempos. ¡Amén!

dissabte, 6 d’octubre del 2012

Adéu Espanya....(Adiós España)

Siento que las noticias se han vuelto tan urgentes que parece necesario dejar “helarlas” para poder mirar con cierta perspectiva. Hay ciertas fotos fijas que parecen indicarnos que las cosas no van a cambiar. Por ejemplo, el gobierno que sigue sumido y lo que es peor nos sume en la tristeza y desánimo, los “planes de ajustes” siguen su curso. Recortes para todos los ciudadanos que nos hemos convertido en rehenes de los mercados. Adiós a la democracia.





El gobierno de Rajoy entiende que el buen ciudadano es aquel no está en su casita , cuando aún no ha sido desahuciado por falta de pago, que protestar en la calle es cosa de gamberros en el mejor de los casos, que las cosas irán mejor si nadie molesta a los que mandan –los mercados-. Si hay protestas la policía –adicta- se encarga de romper la cara a los manifestantes. ¡Suerte de los vídeos! De lo contrario dirían que todo es propaganda. Tenemos a un ministro del interior que utiliza demasiado los adjetivos calificativos, sigue empleándolos como lo hace, esos adjetivos quedarán indisociablemente unidos a una violencia policial gratuita e innecesaria.



Europa se ha transmutado en el escenario entre amigos y enemigos. Ricos y pobres. Merkel(tacher) defendiendo su parcela acosta de los demás. Potencias europeas como Finlandia y Holanda apoyando al gigante alemán, porque piensan que podrán tener apoyos cuando a ellos les vaya mal. El BCE construyéndose una nueva casa que sufragamos todos los europeos. ¡Alguien puede explicarnos, sin que se le caiga la cara de vergüenza, cómo es posible que el precio del dinero en la zona euro sea del 0,75% (5-7-2012) y los Estados lo tengan que pagar al precio que les da la gana los mercados! ¡Si son los Estados que garantizan a los bancos!





Además, Cataluña y su gobierno de CiU ha avisado que su objetivo es la realización de una consulta sobre la soberanía. El gobierno hace lo que nos tiene acostumbrado, hacer como si nada. El Pacto Fiscal volatizado por la torpeza de un cada vez más endeble presidente de gobierno M.Rajoy (PP), ha dado alas a los independentistas. Las reacciones “interesadas” del resto del Estado, generan un aumento del sentimiento nacionalista, incluso a aquellos que no lo era. Habrán elecciones y en función de la correlación de fuerzas, la deriva independentista si es una tendencia significativa, girará hacia la configuración de un estado nacional. Los grupos auxiliares del gobierno del PP han empezado a tocar tambores lejanos, para asustar a propios y extraños. Mientras Cataluña se ve sometida al espectáculo de esperar las ayudas que el gobierno central demora para resaltar quien manda aquí. Esa actitud da mayores razones a los independentistas que ve como un Estado catalán, no tendría que pasar por la humillación de pedir lo que se genera en Cataluña. La percepción que cunde en Cataluña es que sólo nos quieren para seguir pagando, mientras que no quieren oír hablar de las necesidades que como sociedad tenemos.

dilluns, 24 de setembre del 2012

9006


Quisiera agradecer a las 9006 visitantes de esta página. Puse el contador porque tenía la sospecha de que nadie miraba la página. Es verdad que muchas de estas personas tienen la amabilidad de entrar en ella para aumentar la estadística. Sé que hay páginas más inspiradas que la mía. También sé que hay páginas que destilan tóxico es sus páginas y que al parecer está manera de hacer les proporciona muchas personas que quieren intoxicarse. Cada cual es amo de sus tóxicos.



A todos aquellos que tienen el humor de pasear por este blog les agradezco sinceramente que compartan la lectura de estas reflexiones. Es tan difícil de decir algo que tenga sentido que agradecería sinceramente que pudieran escribir sus opiniones, para poder compartir diferentes puntos de vista que nos ayuden a entender lo que está sucediendo en nuestra sociedad cada vez más acelerada y desarticulada.

dissabte, 22 de setembre del 2012

Embolicar la troca


“Embolicar la troca” -complicar las coas-, es una expresión que probablemente se ajuste a lo que está sucediendo ahora mismo en Cataluña y su relación con el gobierno central. Después de la manifestación multitudinaria del 11-S que expresaba muchas cosas, entre ellas, la idea de la independencia. La afirmación nacional que a través de CiU ha sabido capitalizar la sensación de que el gobierno central desoye las reivindicaciones catalanas. El Pacto fiscal que era el programa estrella de CiU ha acabado antes de empezar. La manifestación del 11-S la desbordaba, ante un clamor de mayor independencia. La sensación de que Cataluña paga más de lo que recibe se hace cada vez más evidente.




Los problemas económicos de la Generalitat y que han provocado recortes en todos los servicios, CiU es un gobierno de centro-derecha, ha provocado un rechazo por parte de la sociedad, pero a su vez, CiU ha sabido redirigir el clamor contra los recortes sociales que el gobierno de la Generalitat ha puesto en marcha, hacia la vertiente soberanista. Así, podía matar dos pájaros de un tiro. Por un lado, difuminaba sus responsabilidades en los recortes sociales y otro, lograba recapitalizar la necesidad de un proyecto que ilusione. Los catalanes somos gente que nos gusta ilusionarnos, no lo podemos evitar. Sin embargo, desde el gobierno central, da continuas muestras de un desprecio olímpico sobre los temas que tienen que ver con Cataluña. Mucha gente piensa que los problemas que nos atenazan podrían solventarse a través de la independencia.



El gobierno central no entiende para nada el ansia nacionalista. Es un sentimiento tan válido como cualquier otro. El propio gobierno central da muestras cada día que pasa de un rearme nacionalista español. Nada mejor que cualquier declaración contra el gobierno catalán para aumentar las filas nacionalistas y soberanistas. El gobierno central y su auxiliares mediáticos –el canal 24 horas, no sabía cómo colocar la noticia de la manifestación del 11-S-, no entienden nada del sentimiento nacional. Era fácil si el sentimiento nacional lo capitaneaba HB y ahora Bildu, porque siempre podían decir –y con razón-, que estaban teledirigidos por ETA, pero de CiU no pueden decirlo.




¿Qué sucede con aquellos que no quieren la independencia en Cataluña? La respuesta en la sociedad democrática catalana es que todas las expresiones podrán ser oídas y debatidas, tendrá que haber elecciones donde los partidos podrán fijar sus posiciones a favor, en contra, o lo que consideren oportuno. De ese nuevo Parlament el gobierno que salga y en función de la correlación de fuerzas podrá proponer la convocatoria de un referéndum para saber lo que opina la ciudadanía. No hay estado totalitario, cuando se realiza a través de la participación ciudadana.

 Los momentos actuales cuando el gobierno central se resiste a ser intervenido, el discurso de una nación catalana es un banderín de enganche –tal vez una huida hacia delante-, que al menos parece que la ciudadanía coge las riendas de sus destinos, en vez de dejar que los mercados nos dirijan hacia la desilusión y la pobreza, ¿acaso no parece razonable que muchos suspiren por esa nueva senda independentista?